• La obra premiada, que se creía que era un óleo, ha resultado no ser más que una fotografía cogida de internet.

• El supuesto artista ganador se defiende: "es que no me leí bien las bases del certamen".

La primera edición del Certamen Artístico Universitario, puesto en marcha este año por el Museo de la Universidad de Navarra, ha empezado con mal pie. La obra galardonada con el primer premio del certamen, "My private moon", que supuestamente era un óleo sobre lienzo original, ha resultado no ser más que una fotografía impresa que el también supuesto autor habría cogido de internet.

Juan Aprovechategui, pamplonés de 25 años, bedel de la UNED y de momento ganador oficial del certamen, se excusa en su ignorancia: "es que no me leí bien las bases", ha declarado a este medio. "Estaba un día aburrido navegando por internet, vi no sé dónde unas fotos muy bonitas y me las descargué". Aprovechategui tiene, además de la obra ganadora, una treintena de fotografías descargadas de internet impresas en lienzo, como parte de un pretendido proyecto artístico que iba a titular "Juan in a million" que ya había conseguido "colocar" al Centro de Arte Contemporáneo de Huarte para una exposición colectiva de artistas que tendrá lugar a finales del próximo año.

El jurado, compuesto por miembros del Museo de la Universidad de Navarra, del Museo de Navarra, de la Fundación-Museo Jorge Oteiza y de la Consejería de Cultura está estudiando el modo en que revocar su dictamen. Según declaraciones realizadas a este medio, "no será difícil, porque en las bases del certamen consta claramente que las obras debían ser originales y corresponderse con la descripción y las características de su ficha técnica". Al parecer, Aprovechategui presentó una ficha en la que indicaba que la obra era una pintura al óleo original sobre lienzo.

Las tres obras finalistas tendrán ahora una segunda oportunidad de alzarse con el primer premio del certamen. Una de ellas, "strays", es una instalación fotográfica del tudelano Julián Garcés. Otra, "la vie en violet", es una intervención realizada en el Ayuntamiento de Pamplona, donde la artista alsasuarra Rosa Rosae ha iluminado el edificio con luces violetas. Finalmente, el artista conceptual pamplonés Mikel Harto presentó una grabación de su chocante performance "La Bastilla doméstica", donde, entre otras cosas, el autor guillotina en el salón de su casa a un falso cerdo de plástico, vestido con traje negro y corbata, relleno de billetes de euro, sobres con sobresueldos y tarjetas black que acaba arrojando por la ventana, en una feroz crítica contra el estado de corrupción que vivimos.